martes, 28 de febrero de 2012

Amistad

Si mal no estoy, hay un refrán que dice que el que no tiene hermanos tiene amigos, yo tengo un hermano y tengo por fortuna también amigos, grandes amigos, muchos más de los que merezco. Amigos para reir, para llorar, para cantar, para reñir y sobre todo para conversar.
Con los amigos no se finge, con los amigos se viven experiencias maravillosas que si se saben disfrutar le llenan a uno la vida de grandiosos recuerdos, recuerdos que lo ponen a uno a sonreir cuando se está a solas o cuando  se siente que la vida agobia...
Entre amigos verdaderos no existe la envidia, el egoísmo no tiene cabida y cuando hay alguna contrariedad se arregla hablando y entendiendo las diferencias, porque no solo podemos ser amigos para decirnos cosas bonitas o lo que queremos escuchar, también somos amigos para que nos digamos lo que puede tomarse como  un llamado de atención o una opinión con la que podemos no estar de acuerdo pero que seguro es por nuestro propio bien.

Bonita condición ser y tener amigos, creo que son el mejor regalo que se puede recibir, así que a seguirlos conservando y manteniendo día a día, cultivándolos con paciencia y dedicación.